Redacción
Dos trabajadores rurales fallecieron este lunes a la mañana al quedar atrapados en un tractor que, por motivos que todavía se desconocen, volcó mientras realizaban tareas en una chacra.
El hecho se produjo en San Pedro, provincia de Misiones, y las víctimas que iban a bordo de la máquina agrícola fueron identificadas como María E. y Elisandro D. S. Ambos trabajaban en un lote cerca de Cruce Caballero, a 200 metros de la ruta nacional 14 cuando, cerca de las 11:00 horas.
En el lugar del hecho intervino la Comisaría de jurisdicción de Tobuna, junto con agentes de la Unidad Regional XIV y la Policía Científica.
Drama y dolor
La comunidad de San Pedro, reconocida en la zona y en la provincia por sostenerse principalmente de la actividad agropecuaria y ganadera, lamentó la tragedia, producto de un accidente rural.
La pareja, María E., de 39 años, y Elisandro D. S. de 45, hacían changas en un lote cerca del Cruce Caballero -a metros de la ruta nacional 14-, cuando volcaron con un tractor.
De familia numerosa, el matrimonio sostenía el hogar con trabajos en la chacra y criaban a cuatro hijas: dos de ellas todavía cursan el nivel secundario en San Pedro.
Según testigos oculares de lo sucedido, el tractor perdió el equilibrio en una lomada o desnivel, relieves comunes en zonas de campo. Pero al ser una máquina pesada, habría sido casi imposible evitar el vuelco, por el que terminó aplastada la pareja.
Esto lo confirmó el primer informe médico policial, que concluyó que tanto la mujer como su pareja sufrieron compresión en el tórax por aplastamiento.
La palabra de una testigo
“Yo no vi cómo fue, estaba cocinando cuando escuché gritos, era un vecino que intentaba decirme lo ocurrido para que llame a la policía porque ellos estaban muertos” contó al medio El Territorio Cristina P., dueña de la chacra donde ocurrió el siniestro.
Fuentes con conocimiento del caso precisaron que no se pidieron las autopsias de los cuerpos.
Los mismos ya fueron entregados a sus familiares para ser velados y despedidos en una ceremonia íntima.
Fuente: El Territorio